Es uno de los directores de coro de referencia en España. Desde 2005 es el director del Orfeón Pamplonés, merecedor de la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes 2016, y desarrolla en paralelo una creciente actividad al frente de otros prestigiosos coros y como director de orquesta.
A diferencia de los directores de orquesta, los directores de coro son los grandes desconocidos para el público y para los medios musicales, ¿por qué cree que es?
Existen muchos menos coros que orquestas profesionales. Si una orquesta tiene 15 o 20 semanas de abono en su temporada, su coro no llega a actuar ni en la mitad de los programas y la temporada de conciertos a capella de los coros es bastante exigua. Además, en las orquestas hay continuamente directores invitados, cosa que no ocurre en igual medida con los coros.
Desde 2005 está al frente de uno de los coros con más prestigio de nuestro país, el Orfeón Pamplonés, que recibirá muy pronto la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, uno más de sus muchos reconocimientos.
¿Cómo valora su trabajo con él?
Siempre me da pudor hablar de mi trabajo y prefiero que sean otros quienes lo juzguen, pero objetivamente en los últimos años hemos logrado algunos hitos muy importantes: primer coro español en actuar en el Carnegie Hall con Valery Gergiev, primer coro español en actuar en los Proms de la mano de Juanjo Mena, actuaciones en Nueva York con la New York Philharmonic y el maestro Frühbeck, nuestro proyecto de Carmina Burana con La Fura dels Baus… Y en junio de 2018 seremos el primer coro en debutar en el Festival de Noches Blancas de San Petersburgo… Creo que coro y director hemos crecido a la vez, y hemos tenido unos años brillantes que después del 150 aniversario, celebrado en 2015, han abierto una nueva etapa. Y este nuevo galardón, del que estamos muy orgullosos, es de todos los que han formado el Orfeón en estos 152 años.
Hace solo unos días ha actuado con la Orquesta Sinfónica de Madrid y Juanjo Mena en la Novena de Beethoven en el Auditorio Nacional…
Juanjo Mena, junto a Valery Gergiev, son nuestros dos directores de Honor y lo son por sus méritos y porque nuestra relación con ellos es muy estrecha. Juanjo, que además fue uno de mis primeros profesores de dirección, es una persona muy especial. Trabajamos en su etapa con la BOS (Ein Deutsches Requiem, Elias), en los Proms (Misa en fa menor de Bruckner) con la BBC en 2015, siempre con obras de envergadura. Nuestros conciertos bajo su batuta tienen el plus de ser dirigidos por uno de los más grandes. Con él sudamos, disfrutamos y aprendemos.
Además de su trabajo al frente del Orfeón Pamplonés, tiene en su agenda interesantes proyectos con otros coros e incluso como director de orquesta…
A los directores de coro desgraciadamente se nos dan pocas oportunidades de dirigir a un coro y una orquesta, cosa que sí pasa a la inversa, y no lo entiendo. He tenido la gran oportunidad de dirigir el pasado mes de diciembre el Messiah de Haendel-Mozart en la temporada de la Orquesta Filarmónica de Málaga, lo que ha supuesto un gran reto. Además, debuté en noviembre como dire tor preparador del Coro Nacional y en mayo debutaré con el Coro de la Comunidad de Madrid con una doble labor: preparando la obra Lur Kantak de Antón García Abril y dirigiendo un concierto a capella de abono del Coro con repertorio de compositores españoles. Es una etapa de crecimiento y de aprendizaje que la estoy viviendo con mucha ilusión. Soy un afortunado y estoy muy agradecido a los que depositan su confianza en mí.
Aparte de su labor en la dirección, ¿qué otras facetas musicales le interesan?
He impartido durante muchos años cursos de dirección, pero lo que me tiene más ocupado los últimos años es la recuperación y difusión de obras de autores vasco-navarros. Intento aportar mi granito de arena para dar a conocer, mediante conciertos, conferencias o edición de partituras, el inmenso patrimonio coral que tenemos, muchas veces minusvalorado por nosotros mismos. En especial a Lorenzo Ondarra (1931-2012), que fue premio nacional de música en 1969, un perfecto desconocido salvo en mi tierra, cuya obra coral es de una grandísima calidad. Sin olvidarme de autores actuales y de los Eslava, Gorriti, Donostia, Remacha, Aldabe…
Cuéntenos un poco sobre su formación y trayectoria…
Era tenor de la Coral de Etxarri Arantaz (mi pueblo natal) y comencé a dirigir a los 19 años. Aunque estudiaba derecho, comencé a acudir a cursos de dirección en España y en el extranjero y luego estudié dirección de coros en Musikene con Gabriel Baltes. Además he realizado cursos de dirección de orquesta y de canto, pero la verdadera escuela es dirigir a diario tu coro, que es quien te enseña, y cómo no, aprender de directores como Frühbeck, Juanjo Mena, Ernest Martínez, Ros-Marbá, Gergiev, Jurowski… Ver cómo gestionan un ensayo, cómo solucionan un problema, por qué una frase es mejor llevarla así y no de otra manera… Los momentos que he pasado en casa de Juanjo o con el maestro Frühbeck estudiando Carmina Burana en Washington son impagables.